no suplía su vida
con su obra
se regodeaba
con su poesía
como quien
bebe para olvidar
día tras día
prolongando la resaca
y un día murió
y a su funeral
acudieron tantos ebrios
que en medio del sermón
nadie sabía a quién velaba
si realmente había un finado
si existe alguna muerte
para aquel
que dedica toda su vida a algo.
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